En un mundo donde la experiencia suele ser vista como el mayor activo, muchos jóvenes enfrentan críticas y dudas solo por su edad. Sin embargo, el verdadero valor no radica en los años vividos, sino en la capacidad de generar resultados.
Los jóvenes que han trabajado arduamente, sacrificando horas de sueño y dedicándose a su formación, han adquirido habilidades valiosas que los posicionan como líderes del futuro.
La idea de que ser joven te impide lograr grandes cosas o simplemente ejecutar y generar resultados es absurda desde su concepción hasta su manifestación verbal.
El mundo está lleno de jóvenes que han demostrado que la edad no es un límite. Solo por mencionar a tres, tenemos a Malala Yousafzai, aka Gul Makai, con solo 17 años, ganó el Premio Nobel de la Paz por su lucha por la educación.
Jack Andraka, a los 15 años, motivado por la muerte de un amigo cercano, desarrolló un innovador sensor para detectar la mesotelina (un biomarcador del cáncer de páncreas).
Gitanjali Rao, a los 15, fue reconocida por su trabajo en ciencia y tecnología, creando Tethys, un dispositivo para detectar plomo en el agua de manera rápida y económica A todos los jóvenes que han trabajado arduamente, desvelándose y dedicando incontables horas a su formación y crecimiento. Que han adquirido conocimientos, desarrollado habilidades y se mantienen en un proceso de mejora continua, les digo: no dejen que alguien con más años de experiencia, pero con menos capacidad para obtener resultados, los critique o cuestione su potencial solo por tener 19 o 20 años. La verdadera competencia se mide por la habilidad de generar resultados, no por la edad.
