¿Alguna vez has sentido que tu equipo de trabajo no sabe exactamente qué están haciendo?
¿Las decisiones se estancan en un laberinto que nadie aparenta entender? ¿Son las 4:50 p.m. y las personas ya están recogiendo sus cosas para salir corriendo a las 5:02 p.m. por eso de disimular?
Estas pueden ser señales de una estructura organizacional deficiente.
Lamentablemente, una organización deficientemente estructurada es un ancla para el funcionamiento de cualquier empresa, pero reconociendo y reformando la estructura organizacional, puedes impulsar la eficiencia y claridad en tu organización.
Las consecuencias de ignorar las señales e internalizar que no se está funcionando bien son la diferencia entre la ansiedad extrema y tu paz mental. Algunas características de estas señales son bastante claras: confusión en roles, retrasos en proyectos, una comunicación fragmentada y confusa, entre otras situaciones que suelen ocurrir.
Darle un giro a esto es posible con las estrategias adecuadas. Considera los siguientes ajustes para que mejores la situación:
1. Define claramente los roles: Cada miembro del equipo debe conocer sus responsabilidades y a quién se reportan. Cada miembro es responsable de los resultados de sus respectivos roles. Evita a toda costa tomar la responsabilidad o las consecuencias de las decisiones de las personas asignadas en cada rol. Las consecuencias tienen que ser manejadas por sus respectivos recursos y de igual forma la libertad para poder tomar las decisiones asociadas.
2. Comunicación Efectiva: Fomenta canales de comunicación claros entre las diferentes áreas. Crea una cultura de comunicación de dos vías en donde se valida lo que uno espera del otro y se confirma que cada parte ha entendido las instrucciones adecuadamente.
3. Flexibilidad y Adaptabilidad: Asegúrate de que la estructura pueda adaptarse a los cambios y necesidades de los proyectos. La razón principal para la falta de adaptabilidad es la pobre o errónea implementación de tecnología y sistemas de apoyo. Toda empresa, independientemente de cómo esté estructura debe tener una aplicación para el manejo de proyectos.
El proceso en tres pasos sencillos:
1. Evaluación: Revisa tu estructura actual e identifica áreas de mejora.
2. Implementación: Aplica las estrategias mencionadas, ajustándolas a las necesidades de tu firma.
3. Feedback y Ajuste: Recoge la opinión de los recursos de la empresa y ajusta la estructura según sea necesario.
No olvides que la paz mental es producto del diseño adecuado de la estructura organizacional de la empresa. No dudes en contactarnos para conocer cómo te podemos ayudar. El arte de la organización es saber cómo organizar el talento. – Thomas Jefferson